La mala meteorología ha predominado durante toda esta pasada Semana Mayor en nuestra localidad, lo que ha truncado todas las expectativas en el mundo cofrade local y ha deslucido nuestra Semana Santa, que la hemos vivido en nuestra Ermita de San Sebastián con pesar y obligado conformismo.
Sólo pudimos contar ante nuestras puertas con la Cofradía del Martes Santo, que por las inclemencias meteorológicas tuvo que retrasar su salida, y tanto el paso de Jesús Cautivo como el paso de palio, que llegaron pasadas las 10 de la noche, no giraron para presentarse ante Nuestros Sagrados Titulares por las premuras de tiempo con que afrontaban su Estación de Penitencia.
El Jueves Santo también estuvo con chubascos por la tarde, que dificultaron la asistencia a los altares. No obstante, no faltaron las visitas para orar ante Nuestros Titulares en sus pasos procesionales en la Ermita de San Sebastián, que se mantuvo abierta en el horario habitual desde las siete y media de la tarde hasta las once y media de la noche.
Ninguna de las Hermandades del Viernes Santo pudo realizar su Estación de Penitencia, por la que esta Semana Santa nos hemos quedado sin poder disfrutar de todas las Cofradías en nuestra Ermita.