sábado, 30 de abril de 2016

PASO DE CRISTO



Suponemos que ya en su origen, la Hermandad contaba con un sencillo paso de traslado para Mª Stma. de la Soledad, aunque con la llegada de la imagen del Crucificado, hubo de realizarle reformas como se recoge en el acta del día 29 de marzo de 1950: “Seguidamente el Hº Presidente da cuenta de que con arreglo a la autorización que se le otorgó en la sesión anterior de nueve de diciembre de mil novecientos cuarenta y nueve, se ha procedido a la reforma proyectada del paso de Nuestros Amantísimos Titulares, el cual ha quedado convertido en los llamados de costaleros, cuyos trabajos se han realizado por Nazario Prieto Romero, y para lo que se ha precisado la confección de los respiraderos, que se han hecho a base de talla, en los talleres de José Ramírez Díaz”.


Posteriormente a estas reformas, hizo falta la adquisición de unos candelabros para el paso, que, tras varios intentos fallidos por motivos económicos mientras se usaban unos cedidos por la Hdad de la Sta. Cruz Calle Cabo, se hace efectiva en 1966, según se recoge en acta del 3 de enero: “Seguidamente se expuso las gestiones que se habían llevado a cabo con el Sr. Escultor (Joaquín Moreno Daza) para la adquisición por parte de esta Hermandad de unos candelabros dorados para el paso, lo cual después de exponer a la directiva las condiciones que para el pago de los mismos puso el escultor se decidió en comprarlos en el precio de 30.000 ptas.”.





Tres años después se procede al dorado del paso, según se recoge en acta del 7 de septiembre de 1969: “…se aceptó en invertirlo en el gran sueño de esta Hermandad, o sea en el dorado total del paso de nuestra Hermandad. Para ello se citó a la siguiente semana al Sr. Joaquín Moreno Daza, Escultor, de esta ciudad, el cual después de enterado de nuestras intenciones y una vez hechos los consiguientes cálculos, nos dijo que él se comprometía a dorar completamente todo el paso en un valor de cuarenta mil ptas., lo que después de estudiado por la Hermandad se dio el consentimiento firmándose a continuación, por el Sr. Escultor y por la Hermandad el Sr. Presidente, un contrato por el cual el Sr. Moreno se comprometía a dorar el paso por las pesetas antes dichas, además nos dijo que para las cuatro cantoneras de la canastilla del paso tenía unos escudos representando a la Pasión del Señor, los cuales nos los ofreció para ser puestos en el paso, y que él mismo los ponía, llevando por los cuatro, cuatro mil ptas. …”.

En el año 1971 se adquieren “…las caídas del paso en terciopelo negro, con adornos en doradoy un llamador plateado para el paso”. Dicho llamador se sustituye en 1989 por otro “… obra que ha realizado el orfebre Manuel Ríos, de Sevilla y representa a unos ángeles portando el escudo de la Hermandad, en alpaca dorada y repujada”, junto con “…dos maravillosas jarras en alpaca repujadas y doradas, obra también del anterior citado orfebre, para que vayan a los dos lados del Cristo del Perdón,generosamente donadas por nuestra hermana Dña. Joaquina Periáñez”.



Actualmente, aunque muy deteriorado, sigue cumpliendo una gran labor en nuestra Hermandad, ya que se utiliza para el montaje de los altares de cultos que anualmente celebramos ante Nuestros Titulares.

El actual paso está ejecutado en madera de caoba de Brasil por el tallista sevillano D. Jesús Curquejo Murillo entre los años 2000 y 2004. De línea rota en planta y alzada, con ingletes y capillas centrales donde se alojan imágenes de los santos varones. En los contrafuertes del bombo, en el tercio superior, se abre hueco para albergar cuatro ángeles pasionarios. 
En las esquinas una ménsula de angelotes, de la que parte el candelabro, y sobre la que se alojan los cuatro Evangelistas. Los respiraderos incluyen capillas centrales con columnas salomónicas de ébano y capiteles en plata de ley. Las imágenes de las capillas, los Evangelistas y arcángeles están policromadas en colores tierra y estofados en plata. Las cabezas de querubines, de gran profusión en respiraderos y canastilla, son de madera de naranjo.

En la Semana Santa de 2005 se estrenan los candelabros ejecutados en madera de cedro en los talleres de Caballero Farfán, los cuatro de las esquinas con siete luces, y dos laterales de cinco luces. Los candelabros aplican metal plateado en las coronitas, realizadas en los talleres del orfebre sevillano D. Antonio Santos Campanario, a fin de continuar con la conjunción de madera y metal.

Las cartelas centrales de los respiraderos en frente y trasera llevan los escudos de la Hermandad y la Parroquia, y en las laterales y canastilla escenas de la pasión. Ejecutadas en metal plateado por Orfebrería Maestrante.

Las aureolas y plumas de los cuatro evangelistas, en plata de ley, son del orfebre Antonio Santos Campanario, donadas por esposas y novias de los costaleros del paso y la cuadrilla de la Virgen. Los atributos pasionarios que portan los cuatro arcángeles, así como el pendón de San Juan Bautista, obra del mismo orfebre sevillano, están ejecutados en metal plateado y fueron donados por la cuadrilla de costaleros. 


El llamador de 1989 fue plateado por Orfebrería Maestrante para colocar en el nuevo paso en el año 2002, consolidándosele las cogidas de los ángeles tenantes del escudo de la Hermandad.


En el Domingo de Ramos de 2019 procesiona por primera vez en el frontal del paso el Relicario que porta la copia del clavo de Nuestro Señor Jesucristo, reliquia donada a la Hermandad por las Hnas. Gordillo Lasarte durante el Quinario Solemne del año 2008, consistente en el facsímil (idéntico al original) de un clavo de Cristo que se venera en la Basílica de la Santa Cruz de Jerusalén de la ciudad de Roma que venía acompañada de un certificado de autenticidad escrito en latín que data de 1853 en el que se especifica el origen de la reliquia, que es una copia exacta y perfecta del original y que estuvo unida al original por una seda roja lacrada con el sello de la congregación Cisterciense que la custodia, seda que aún conserva la copia facsímil y que, según el Rvdo. Padre D. Francisco Martín Sirgo, por dicho contacto ha adquirido la sacralidad de la reliquia original.

El relicario fue bendecido por el Rvdo. Padre D. José Vilaplana Blasco, Obispo de Huelva, el 26 de marzo de 2019, durante el primer día del Solemne Quinario de la Hermandad, y ejecutado por el orfebre D. Gustavo Larios Jacinto en plata de ley repujada. Recibe culto todo el año en la Ermita de San Sebastián, ubicado en el Altar de la Virgen de la Soledad junto al documento de autenticidad.