El pasado domingo 6 de septiembre, nuestra Hermandad recibió desde Pilas (Sevilla) la triste noticia del fallecimiento de NHD Diego Colchero Barba a la edad de 82 años. Diego Colchero ha sido a lo largo de toda su vida un gran artista, gran cofrade, pero sobre todo una gran persona, conocido principalmente por ser Vestidor durante muchos años de la Virgen de la Merced de la Hermandad sevillana de Pasión, su Virgen de la Soledad de Pilas a quien dedicó toda su vida, la Virgen de la Soledad de Hinojos,... entre otras muchas más imágenes de las provincias de Huelva y Sevilla.
Diego llega a nuestra Hermandad en la segunda mitad de la década de los 80 del siglo pasado para enseñar a vestir y perfeccionar en dicha labor a nuestras Camaristas, dotando de su impronta y gracia sevillana en la vestimenta a Nuestra Señora de la Amargura, que desde esa época lucirá las mismas tembladeras en su tocado procesional que muchas de las otras Vírgenes que él también vestía en otras localidades.
En las sucesivas visitas que hacía a nuestra ciudad y por la amistad surgida con gran parte de la Junta de Gobierno de la Hermandad de aquel momento, se ofrece a crear junto a un nutrido grupo de mujeres de nuestra Corporación, el taller de bordados que tanto contribuyó a enriquecer el patrimonio de nuestra Hermandad y de su mano y maestría nació el diseño de las bambalinas y la Gloria del paso de palio de Nuestra Señora de la Amargura entre otras muchas obras que nos ha legado.
A través de estas líneas y siempre agradecidos por sus años de trabajo y dedicación, esta Hermandad quiere expresar sus condolencias a sus familiares y amigos, y unirse al dolor por su pérdida. Seguro que Diego ya goza del descanso eterno junto a su Santísima Virgen, a quien tantísimo amor le profesaba, con la seguridad de que tan Celestial Señora lo ha acogido entre sus brazos.
Rogamos una oración por su alma y que Nuestra Señora lo acoja en la misma Gloria de oro y granate que él le diseñara y que Ella le acompañe ante Dios para que así alcance la Vida Eterna.
Descanse en paz, Hermano Diego.
