Ayer lunes finalizaron los cultos celebrados durante estos primeros días de noviembre en sufragio por las Ánimas Benditas del Purgatorio.
Dichos cultos se iniciaron el sábado 1 de noviembre, festividad de Todos los Santos, con la Veneración de María Santísima de la Soledad, que desde las diez de la mañana hasta las ocho de la tarde recibió numerosas visitas de fieles y devotos en nuestra Ermita de San Sebastián.
El domingo 2 de noviembre, festividad de los Difuntos, dio comienzo a las seis y media de la tarde la Novena por las Ánimas Benditas con el siguiente orden: Santo Rosario y el Ejercicio de la Novena, consagrándose a continuación la Función de los Difuntos. Dicha Eucaristía, ofrecida por el descanso eterno de las almas de todos nuestros Hermanos y fieles difuntos, fue presidida por nuestro Párroco, el Rvdo. P. D. Andrés Vázquez Martínez.
Para la ocasión, el altar siguió el estilo tradicional de la Hermandad, con la Virgen de la Soledad a los pies de Nuestro Crucificado ante dosel negro.
Se nos presentaba, gracias a la labor de su vestidor D. Fernando Andrade y la ayuda del equipo de Camaristas y Priostía, Nuestra Señora de la Amargura magistralmente ataviada "de luto" en memoria de todos nuestros hermanos y fieles difuntos durante estos días de noviembre en que les recordamos y rezamos por su descanso eterno en nuestra ancestral Novena de Ánimas.
En el recientemente estrenado retablo de María Santísima de la Soledad han sido colocadas para la Novena sendas columnas de estilo corintio que han sido donadas por nuestros hermanos Félix M. Pérez y Gonzalo Rodríguez, adquiridas en un tallista de Granada y restauradas desinteresadamente por NHD Diego Gallego García y con el trabajo de carpintería a cargo de Curro Díaz. Con ello estamos completando poco a poco el bello retablo en que la Santísima Virgen de la Soledad es venerada durante todo el año.





